En la tarde del lunes 15, la Justicia determinó un fallo favorable a Luis Ross, delegado del flamante sindicato de la empresa metalúrgica Cla Sienz, de Colonia del Sacramento, en el marco del juicio de reposición laboral por persecución sindical que el trabajador había iniciado junto con la Unión Nacional de Trabajadores de la Industria Metalúrgica y Ramas Afines (UNTMRA).

Los trabajadores de esa industria se encuentran en conflicto desde febrero, cuando la empresa, que está ubicada en la zona franca de Colonia del Sacramento, anunció los despidos de varios trabajadores que se habían afiliado a un sindicato conformado semanas antes. Desde entonces, empresa y trabajadores han mantenido varias reuniones en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, en un proceso que ha tenido varias idas y vueltas.

En efecto, hace 20 días la empresa resolvió dar marcha atrás en la mayoría de los despidos, salvo en el de Ross, delegado y portavoz de la organización sindical.

La demanda fue presentada en el Juzgado Letrado de Colonia el lunes 8, mientras que el viernes 12 se llevó a cabo una audiencia en esa sede judicial.

Según informó Ross a la diaria, en el ámbito judicial este caso se resolvió de “forma rápida” porque “estaban las cosas muy claras”, ya que “se trataba de un claro caso de persecución sindical”. “El martes 16 a las 6.00 deberé reintegrarme al trabajo, después de una larga espera que generó ansiedad en forma personal y también a los compañeros”, expresó.

“La persecución y el despido fueron unas injusticias que no deben ocurrir en los lugares de trabajo” y “este fallo judicial favorable forma parte de un largo camino que debemos recorrer los trabajadores para consolidar el sindicato”, destacó el trabajador metalúrgico.

La empresa, en tanto, anunció que apelará este fallo de primera instancia.

Fallo favorable

En la sentencia, el juez Guillermo Royes estableció que “los medios de prueba incorporados a la vez que diligenciados en el presente proceso y su justa valoración bajo inmediación procesal” conducen “a tener por ciertos y probados los hechos alegados por la parte actora correspondiendo declarar la nulidad absoluta del despido antisindical de Ross, como consecuencia de las acciones y omisiones de la parte demandada que se identifican como discriminatorias y que menoscabaron la libertad sindical”.

En esa línea, Royes decretó la “efectiva reposición” de Ross “a su puesto de trabajo conjuntamente con la condena a la parte demandada del pago de la totalidad de los jornales y demás beneficios impagos desde el momento de su despido (11 de marzo de 2024) y hasta su efectivo reintegro”.