Más de 450 personas sentadas y paradas llenaban en la noche del domingo la sala Azul de la Intendencia de Montevideo, el auditorio más grande del piso 1½. Era el cierre de la 38ª Feria Internacional del Libro y tocaba el dúo Larbanois & Carrero, pero el atractivo principal era la presentación de una biografía autorizada del ministro del Interior, Eduardo Bonomi, que lleva por título su apellido y que el escritor Luis Masci acaba de lanzar por la editorial Fin de Siglo (ver ladiaria.com.uy/AErp). Edmundo Canalda, director del sello, cuenta que la ceremonia fue “normal”, al menos durante el discurso del biógrafo y el biografiado, los dos únicos oradores de la noche. Pero cuando Bonomi cerraba su presentación un hombre que estaba entre el público levantó la voz.

“¿Mentir es un delito?”, le preguntó varias veces al ministro, según muestra un video que reprodujo ayer de tarde Telemundo. Varias personas que estaban en el público sisearon en pedido de silencio; Bonomi no contestó, y el que preguntaba le recriminó los actos de violencia durante el desalojo del edificio del Codicen, el 22 de setiembre. “Usted debería renunciar, señor ministro, porque es un mentiroso”, gritó. El video del noticiero muestra cómo se le acercan al menos cuatro hombres vestidos de particular y lo conducen hasta la salida.

Según pudo saber la diaria, el hombre se llama Juan y es un miembro de Plenaria Memoria y Justicia que vive y milita en el departamento de Canelones. “Hay gente que no puede movilizar masas, y entonces se trata de meter donde hay otra gente y utiliza lo que otro convoca para decir lo que piensa”, dijo Bonomi minutos después, cuando la sala recuperó la calma; una frase que parecía referir a lo que recién había pasado, pero también a la participación de Plenaria y el sindicato del taxi en los enfrentamientos con la Guardia Republicana en la sede del Codicen.

Los hombres de particular, miembros de la guardia personal del ministro, trasladaron a Juan unas cuadras, hasta la Seccional 2ª, contaron a la diaria algunos allegados al militante. Irma Leites, líder de Plenaria, estaba en la feria pero lejos de la presentación del libro. “No me habrían dejado entrar”, comentó a la diaria. Cuando se enteró de la situación, fue hasta la comisaría junto con algunos de sus compañeros. Dos horas después, Juan quedaba libre pero con una citación para declarar en el juzgado penal al día siguiente, en la mañana de ayer.

“Bonomi está poniéndole cada vez más límites a lo que se puede hacer”, dijo Leites ayer en El poder real, la audición del abogado Gustavo Salle Lorier en Radio Fénix. En el programa -un espacio en el que al partido de gobierno, blanco principal en la hora de duración, se lo nombra indefectiblemente como “Fraude Amplio”- conductor e invitada comentaron el incidente y cuestionaron a la administración Bonomi. Coincidieron en que hay una criminalización de la pobreza y de la disidencia política, y Salle se ofreció, ahí en el aire, a oficiar como defensor. Minutos después de que cerrara el programa, Leites y el abogado llegaron al Juzgado Penal de 20º Turno, donde hacía unos minutos esperaba Juan junto a otros miembros de Plenaria. “El Ministerio del Interior legitima los operativos policiales con encapuchados, con funcionarios de Inteligencia que van a buscar a los militantes a sus casas y con falta de garantías individuales”, criticó Leites en diálogo con la diaria mientras Juan ingresaba en el edificio.

Según contó Salle más tarde, en un principio la Seccional 2ª remitió el caso a un juez de faltas, que entendió que no le correspondía actuar porque no se aplicaba la figura de “desorden público” y derivó el caso al juez letrado en lo penal Eduardo Pereyra, pero la indagatoria quedó en manos de la jueza María Noel Odriozola, ya que del domingo al lunes hubo un cambio de turno.

Ayer, la fiscal Cristina González interrogó a Juan durante dos horas. Fue “exhaustivo”, calificó Salle, que supone que si se presentan cargos podrían ser de desacato. Pero ni Bonomi ni su jefe de custodia, que también compareció ayer, presentaron denuncias. Hubo, sí, un desacuerdo entre la versión del parte policial y la del defendido: los agentes que lo detuvieron declararon que acusó a Bonomi de “asesino”, pero Juan lo niega, los videos que difundió Telemundo no lo registran y Canalda, de la editorial Fin de Siglo, dice no haber escuchado eso.

En la tarde de ayer, El Observador informó que la jueza Odriozola había solicitado una pericia psiquiátrica al militante para la mañana de hoy. “No sabemos si el pedido viene de una resolución de la jueza y de la Fiscalía, pero la pericia es una medida judicial invasiva que determina si la persona es imputable o inimputable, si es o no un débil mental que no conoce las consecuencias de sus actos”, dijo el abogado a la diaria. “El pedido denigra el acto político que realizó mi defendido”, consideró. Salle adelantó que el militante no acudirá a la instancia (que no es obligatoria) y que, en su lugar, la defensa presentará un escrito formal que fundamenta que no hay elementos que justifiquen el pedido. Juan no tiene antecedentes penales, y su segundo apellido es Revuelta.